viernes, 6 de enero de 2012

El nuevo montaje de gobierno, para justificar la criminalización de la protesta.

Antecedentes recibidos por el Departamento de Derechos Humanos de la CUT indican que "ataques" a carabinera, y posterior incendio de moto policial y bus, fueron orquestados por los organismos de seguridad del gobierno.

El día de ayer, la opinión pública fue sorprendida por el "ataque" a la carabinera Jacqueline Urbina Núñez, y a un chófer del Transantiago, cuyo bus fue quemado. Esto habría ocurrido, supuestamente, en el contexto de una marcha de apoyo al pueblo mapuche, en la conmemoración del asesinato de Matias Catrileo, perpetrado en 2008 por agentes del Estado chileno.

Según antecedentes recibidos por el Departamento de Derechos Humanos de la CUT, dicha acción habría sido planificada y orquestada desde interior de los organismos de seguridad, policiales y de gobierno, usando una antigua receta.

1. Que sea un acto alevoso y manifiestamente cobarde a personas inocentes: El ataque, en grupo, a una funcionaria de Carabineros y a un trabajador del Transantiago.

2. Que dicho ataque sea perpetrado por sujetos anónimos o encapuchados que la prensa oficialista señala como integrantes de la marcha, o del grupo que se quiere estigmatizar.

3. Que sea notoriamente irracional y desproporcionado: La agresión a una carabinera que sólo dirigía el tránsito y que le abría camino a la marcha.

4. De gran impacto público: En el centro de Santiago y cubierto por todos los medios masivos cercanos al gobierno, especialmente de televisión, los cuales extrañamente tuvieron en esta ocasión imágenes directas del evento. Las marchas mapuche, normalmente, no se cubren ni aparecen en sus pautas informativas. Esto sucedió, además, justo el día en que se votaba la Ley Hinzpeter que pretende prohibir las manifestaciones y criminalizar a los movimientos sociales.

La manipulación se completa con imágenes dantescas del incendio y testimonios de personas asustadas. Como contrapartida, ninguno de esos medios preguntó a los dirigentes mapuche o a los familiares de Matías Catrileo su versión de lo ocurrido.

5. Con objetivos políticos y comunicacionales: Desacreditar al movimiento mapuche, desperfilando el homenaje a una víctima de la violencia de Estado como Matías Catrileo, sacar de la pauta noticiosa el mega incendio de Torres del Paine, imputado a un ciudadano israelí presuntamente miembro de las fuerzas armadas de ese país, y lavar la imagen del vocero de Carabineros, el general Bruno Villalobos, quien en este acontecimiento aparece casualmente ante las cámaras como el Jefe Metropolitano subrogante para dar cuenta de los posibles sospechosos del atentado a la carabinera y al bus del Transantiago.

Este general, quien dirigió la Dirección de Inteligencia de Carabineros (Dipolcar) hasta 2012, ha sido cuestionado por las escuchas telefónicas ilegales a parlamentarios, embajadores y dirigentes sociales. .

De esta manera, el ministro Hinzpeter se frota las manos, preparando el terreno comunicacional para, en el futuro, aplicar a los dirigentes sociales la Ley de Seguridad del Estado que penaliza a los convocantes.

Se está ensayando así el contexto con que los servicios de seguridad del gobierno, asesorados por especialistas extranjeros (fundamentalmente israelíes), enfrentarán las marchas sociales del 2012. Perfeccionan su fórmula. Para ello apuestan a la infiltración de los grupos que se asumen como los "más radicalizados" con el fin de repetir la receta.

Libreto conocido

Uno de los que aparecía como el clásico dirigente de la ultra izquierda, llamando a la violencia extrema e irracional en el gobierno de la Unidad Popular, era el comandante Raúl. Este actor, cuyo nombre era Osvaldo Romo Mena, se había incrustado en el movimiento de pobladores del sector Lo Hermida, en Santiago, transitando entre las tomas y campamentos designados con nombres rimbombantes como Vietnam Heroico o Nueva La Habana.

Su función era radicalizar el movimiento social con actos de violencia callejera irracional, creando las condiciones de miedo extremo que permitieran justificar el golpe de Estado.

Después del golpe de 1973, este revolucionario reapareció interpretando su verdadero papel. Se convirtió en uno de los torturadores más despiadados de la DINA, compartiendo el honor de servir bajo las órdenes del Brigadier Miguel Krassnoff en la agrupación Halcón I, perteneciente a la Brigada Caupolicán que estaba destinada a la persecución del MIR.

Otra operación del mismo tenor fue la del VOP, Vanguardia Organizada del Pueblo, quienes alegando una venganza política por la represión de pobladores en Puerto Montt en 1969, asesinaron cobardemente al ex ministro del Interior de Eduardo Frei Montalva, Edmundo Pérez Zujovic, el 8 de junio de 1971. A cargo de esta maniobra estaba Ronald Rivera Calderón, quién había sido expulsado de las Juventudes Comunistas y del MIR por extremista.

Con ese asesinato, se materializó otra de las condiciones para el golpe de Estado de 1973: que la Democracia Cristiana perdiera su aparente neutralidad y pasara, públicamente, a engrosar el bloque opositor al gobierno popular, integrando el CODE junto al Partido Nacional.

Esta receta la dio el delincuente y genocida internacional, Henry Kissinger, quien señaló en el Comité de los 40, cuando se planificaba el escenario para el golpe de Estado en Chile, que para concretar la masacre no sólo había que financiar a la derecha chilena, partiendo por El Mercurio, sino apoyar a la ultra izquierda para acelerar el proceso. En agradecimiento, se le otorgó el Premio nobel de la Paz en 1973. Todavía no lo devuelve.

En la dictadura, los servicios de seguridad también volaban torres de alta tensión (para mayor información ver la Historia Oculta del Régimen Militar de Ascanio Cavallo). Así, se podía justificar la implantación del estado de sitio, usado para perseguir impunemente a la oposición y fundamentar, de paso, la peculiar guerra que el almirante Merino le había declarado a los Soviets.

A los infiltrados de la marcha mapuche del 4 de enero de 2012, y que participaron en el centro de Santiago incendiando el bys,se les comunica que su bono de estímulo puede ser retirado, previa firma de egreso fiscal, en Tenderini 115 o en Alameda 280, Santiago, según su metro más cercano. La agresión a la carabinera se pagará aparte. No se les cancelará el derecho a imagen por las repeticiones en los noticiarios de televisión.

2 comentarios:

  1. "asesinaron cobardemente al ex ministro del Interior de Eduardo Frei Montalva, Edmundo Pérez Zujovic, el 8 de junio de 1971". Cobarde es el que escribe este artículo denostando a gente que en su momento ajustició al Asesino Zucovic. Otra Patraña: "4. De gran impacto público: En el centro de Santiago y cubierto por todos los medios masivos cercanos al gobierno, especialmente de televisión, los cuales extrañamente tuvieron en esta ocasión imágenes directas del evento". Las escenas fueron grabadas por la prensa popular callejera y en ningún momento se visualiza que ataquen a la Funcionaria del Estado, Como se nota que ni fueron a la marcha como buenos burgueses que son lo vieron por la Tele.

    La Cut cada día da más Asco. Na más que decir.

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